La confianza de los clientes, inversores y reguladores depende en gran medida de la capacidad de una empresa para operar de manera transparente y cumplir con las leyes y regulaciones aplicables. Aquí es donde entra en juego un protagonista esencial en cualquier organización el oficial de cumplimiento.
En un mercado altamente competitivo, la habilidad de vender eficazmente es fundamental para el éxito de cualquier empresa. Las estrategias de ventas bien planificadas pueden marcar la diferencia entre el crecimiento empresarial sostenible y el estancamiento.
¿Cómo está funcionando financieramente tu empresa? La obtención de ganancias y pérdidas puede ser fácilmente monitoreable para luego tomar decisiones informadas mediante el balance de resultados, una herramienta indispensable para ti, tanto si eres el dueño de tu negocio, como si eres el gerente de la empresa.
En el turbulento mar del crimen financiero, donde las olas de dinero sucio amenazan con inundar nuestro sistema económico, emerge una práctica clandestina que desafía la integridad del mundo financiero: el lavado de activos.
Los sujetos obligados son aquellos que deben cumplir con lo dispuesto en los Capítulos 10 y 13 de la Circular Básica Jurídica de la Supersociedades, los cuales definen los parámetros del SAGRILAFT y el PTEE.
Para todas las compañías, especialmente para las MiPymes, es esencial evaluar la capacidad financiera de sus clientes y proveedores antes de hacer negocios con ellos. La capacidad financiera se refiere a la facultad de una empresa para cumplir con sus obligaciones financieras a largo plazo, incluyendo el pago de deudas y el mantenimiento de un flujo de efectivo saludable.
Mantener un negocio o una empresa puede ser una tarea titánica, y es normal no saber por dónde empezar. Incluso las empresas pequeñas representan retos gigantescos que alguien debe solventar, y en muchas ocasiones, ese alguien eres tú.
El concepto compliance hace referencia a un grupo de prácticas y procesos que una compañía implementa para asegurar que las actividades realizadas cumplan con las leyes, normas y estándares aplicables a su sector. La World Compliance Association define este término como un conjunto de buenas prácticas que las empresas adoptan con el objetivo de identificar y clasificar los riesgos operativos y legales.